Esta organización de extrema derecha alcanzó bastante notoriedad durante el 2020, tras filtrarse audios en que su vocera Gloria Naveillán, organizaba un violento desalojo de una toma de comuneros mapuche en la municipalidad Curacautín.
La agenda represiva en el Sur vuelve a estar al centro del debate público. Esto luego de que el presidente Sebastián Piñera anunciara un gran “acuerdo nacional por La Araucanía”, lo que concretamente significa recrudecer los niveles de militarización en la zona, presionado por gremios históricamente reaccionarios, como son camioneros, y sectores latifundistas organizados.
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“Durante los próximos días, como Presidente de Chile, voy a convocar a los distintos sectores políticos y a las distintas organizaciones de la sociedad civil, relevantes para este propósito, para buscar un acuerdo nacional que nos permita unir nuestras fuerzas para poder derrotar esta ola de violencia y esta ola de atentados terroristas que tanto daño les ha causado a tanta gente en las regiones del sur y que significa un grave atentado a nuestro Estado de Derecho, al orden público, a la seguridad ciudadana y a nuestra democracia” señaló el mandatario.
Es en este contexto que se posiciona la Asociación para la Paz y la Reconciliación en La Araucanía (APRA), quien hoy día encabezó un “Pantalonazo” exigiéndole al presidente que se colocara de una vez los pantalones para aplicar mano dura, y declarar Estado de Sitio en la Araucanía.
Sin embargo, este no es una acto aislado, sino que responde a un historial de acciones de corte fascistoide por parte de este grupo de ultraderecha que escalan cada vez más en sus métodos, frente a la lucha por la autodeterminación del pueblo Mapuche, y la recuperación de terrenos en la zona.
Según un reportaje de Interferencia "Más de 500 comunidades han cumplido todos los requisitos pero llevan años de espera. El año pasado el Estado sólo gastó el 8% del presupuesto de la CONADI del Fondo de Tierra". Entonces ¿Qué más sabemos de APRA?
¿Qué es la APRA?
La APRA es una organización de extrema derecha conformada principalmente por empresarios agrícolas y civiles, que si bien de acuerdo a un estudio realizado por CIPER Chile, venían y organizándose y actuando desde ya el año 2015, frente a la recuperación de predios y terrenos por parte de comuneros mapuches, esta toma mayor consistencia durante el 2019, haciendo suyas una serie de reivindicaciones vinculadas al sector empresarial de la zona, principalmente contra el terrorismo, desde su perspectiva evidenciados en la quema de camiones, robos, y en la muerte del matrimonio Luchsinger McKay.
Esta organización tiene como representante o vocera a Gloria Naveillán, quien se postuló como diputada por la Unión Demócrata Independiente (UDI) por el distrito 22, actualmente militante del Partido Republicano presidido por José Antonio Kast, y es reconocida como una defensora de la represión policial en La Araucanía. Su historial de publicaciones aberrantes señalando que el asesinato de Camilo Catrillanca fue un montaje, y sindicando al comunero mapuche como “un maldito delincuente” habla por sí mismo del perfil de los integrantes de su organización.
Esta organización generó un revuelo importante durante el mes de agosto del 2020, luego que se filtrara un audio proveniente de la mismísima vocera Naveillán, en el que quedaba en evidencia la organización del cobarde y violento desalojo por parte de una muchedumbre, de la toma pacífica realizada por comuneros mapuches en la municipalidad de Curacautín. Toma efectuada en el marco del apoyo al machi Celestino Córdova, quien llevaba meses en una huelga de hambre que deterioró gravemente su salud.
APRA se ha caracterizado por un claro perfil de victimización ante lo que denominan como “violencia rural” en la zona sur, aludiendo a un abandono tanto a nivel judicial, policial e incluso económico por parte del gobierno de Piñera, siendo permanente su interpelación a ministros e incluso al mismo mandatario para dar una “solución” al conflicto en La Araucanía, que básicamente para ellos significa militarización, mayor represión, y mayores condenas frente a la transgresión de la propiedad privada. Una posición que también muestra alianzas con sectores que alientan este animo reaccionario, como es la Confederación Nacional de Transporte y Carga (CNTC), la Confederación Nacional de Dueños de Camiones (CNDC) y Mujeres por La Araucanía.
Brotes fascistizantes en medio de la agenda represiva del gobierno
No es un misterio para nadie la agenda represiva instalada por el gobierno posterior al “Acuerdo por la Paz” del 15 de noviembre del 2019, con la firma de los partidos de la “Oposición”, incluidos sectores del Frente Amplio.
La línea de descomprimir las calles por medio del control policial e incluso militar potenciado por las medidas restrictivas en los derechos democráticos del conjunto de la población, como el irracional toque de queda que se mantiene actualmente, es el sello de un gobierno que financia millones para Carabineros, quienes atentan contra la vida de menores de edad, e incluso asesinando artistas callejeros, y que hoy piensa dar un paso más allá en La Araucanía.
Sin embargo, hay sectores de las derecha que incluso esto no les parece suficiente, y descargan todo su arsenal ideológico xenófobo, racista, machista y anti-izquierda aprovechándose la profunda crisis sanitaria y económica en la que nos encontramos actualmente, donde sus ideas hacen eco en los sectores más atrasados de la sociedad. Un caldocultivo para que organizaciones como APRA sean capaces de envalentonarse cada vez más, recrudeciendo sus métodos de ataque físico contra el activismo de izquierda y los movimientos sociales que se articulan contra la impunidad del gobierno y las fuerzas del orden, quienes gozan de impunidad, mientras hoy hay más de 2500 presos políticos privados de libertad.
Hoy más que nunca es fundamental organizarnos contra la política represiva y persecutoria del gobierno de Piñera que en diálogo con sectores que defienden intereses empresariales, buscan no tan solo acallar la voz de quienes se manifiestan frente a las medidas criminales del mandatario, sino también contra el ataque de grupos fascistas cada vez más agresivos que buscan amedrentar con amenazas de muerte y golpizas cobardemente orquestadas por las clases dominantes. ¡Basta de terrorismo de Estado!¡Abajo la agenda represiva del gobierno!¡Ni un peso más para represión! ¡Y libertad a todas y todos los presos políticos Mapuche y de la rebelíón!